Tragedia griega fue uno de los apelativos con la que los románticos del fútbol designaron la eurocopa del año 2004, en la que el conjunto dirigido por Otto Rehaggel se impuso, contra todo pronóstico, con un fútbol calificado de rácano y especulativo.
La Grecia campeona era un equipo muy trabajado tácticamente, con un trabajo férreo en defensa, con dos líneas de 4 muy juntitas y coordinadas, que frustraron a otros equipos técnicamente mucho más cualificados a lo largo del torneo. A su vez, creaba muchísimo peligro a balón parado, aprovechando la altura de jugadores como Dellas o Charisteas. Con esta receta, consiguió ir avanzando ronda tras ronda hasta imponerse a la final a Portugal, por 2 a 1.
Recordé esta selección cuando vi el partido entre Uruguay y Argentina de la copa América. En el minuto 40 de la primera parte, el conjunto argentino vio las semifinales muy de cerca: partido empatado a 1 y el rival con 10. Pero Uruguay apeló a la receta y, con dos estiletes como Forlán y Suárez, que volvieron loca a la zaga albiceleste, y un centro del campo en el que Egidio Arévalo Ríos recordó al mejor Mascherano, Pepe o Gattuso, resistió los envites argentinos a base de trabajo, disciplina y sacrificio. Después, en los penalties, hasta Martín Cáceres pareció dotado de una gran habilidad en su lanzamiento...
Por cierto, me parecería un fichaje interesantísimo para equipos que busquen un medio centro defensivo con gran rigor táctico y excelente trabajo. En su contra está que, en la distribución de balón, es justito, aunque no se complica la vida y no pierde muchos balones.
Y el otro partido estrella, donde el nuevo jogo bonito team fracasó ante un incommensurable Justo Villar y un punto de penalty traidor (fallar 4 penalties en una tanda tirando 3 fuera del arco es increíble).
Qué está ocurriendo, pues, en esta Copa América?
Llevo años viendo el fútbol que realizan equipos y selecciones sudamericanas en los grandes eventos. No hablo tanto de Brasil o Argentina, las super-selecciones, hablo de equipos como Uruguay, Paraguay, Bolivia, Colombia... y constato que se trata de equipos que superan, y de bastante, a los europeos en lo que se refiere al trabajo defensivo, mentalidad y disciplina táctica.
Ejemplos?
España lo pasó horrible en el Mundial contra Paraguay, que desaprovechó un penalty en contra, con 0 a 0 en el marcador... quien sabe que hubiera pasado si se llega a anotar.
El mejor Barcelona de la historia sufrió muchísimo para conseguir su primer intercontinental, ante Estudiantes (Pedro empató a pocos minutos del final, posteriormente fue Messi quien conseguiría el gol del triunfo). Unos años antes, en la época Rikjaard, perdió contra el Internacional de Porto Alegre (en el que destacaba un jovencísimo de 18 años, al que llamaban Alexandre Pato...).
Ambos equipos plantearon, contra el fabuloso FC Barcelona, un trabajo defensivo y rigor táctico que volvieron locos a los culés. El mismo rigor defensivo y táctico que vimos en Uruguay o Paraguay; peligro a la contra y en el juego a balón parado.
Y Quizá esa Grecia de Otto Rehhagel se parece mucho a la manera de jugar a fútbol que hemos visto en algunas selecciones en este torneo...
Así pues, el fútbol, afortunadamente, no tiene una sola versión. Estos equipos demuestran ser competitivos con armas diferentes al tiki-taka, toque, posesión y vocación ofensiva. A base de trabajo, rigor táctico, sacrificio y disciplina, también puede llegar el éxito.
Aunque es obvio que a los espectadores no nos parece tan estético, cierto?
Qué opináis?
Un saludo!
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